Saints aren’t perfect they are just kinder than the rest of us

Querida Mami,

Tú me decias que yo era una santa, pero eso es lo que tú te mereciste aquí y ahora en el cielo.  Ocho años han pasado desde que te puedo dar un abrazo y mirarte a tú preciosa cara, arreglarte el pelo, y reír nos juntas. No se pasa un día que no quisiera verte y disfrutar de lo bonito contigo Mami.

Hoy encontré  este recuerdo de un regalo de perlas que me diste. Gracias por mandármelo hoy.

Tantas memorias preciosas tengo de nuestra vida juntas.  La madre mejor del mundo y ahora de los cielos. Que suerte tienen todos los que tú sigues ayudando con tú vida espiritual. Yo se que tú siempre me acompañas por este camino.  Te siento en las mariposas, las flores, el alba, el cielo, los pajaritos, las velas, las vistas en el parque y del mar y cuando pienso en ti me iluminas la vida, me llenas con animo como lo hacías antes que te llevaron para ser un ángel.

Te quiero Mami hoy y hasta la eternidad. Que tú alma siempre esté en paz por hacer una madre y abuela a Susannita maravillosa.

Susanna